Mudanza y callejón
Los poemas Mudanza y Callejón los escribió el autor en uno de nuestros talleres de escritura de poemas de ciudad.
Carlos Espinosa Marinovich
Mudanza
Me habitan el aire y sus partículas flotantes,
el fuego que abraza a los muertos que caminan,
con su historia de basuras y fracasos sobre el hombro;
las ánimas empapadas de cansancio,
que ríen sin sentirse nunca en casa
sobre un suelo que no es para sus pies;
los árboles de piedra alumbran
con focos moribundos
de los que nadie se acuerda.
Por la ventanilla, la vida vuela hacia atrás.
Los puentes ondulan con furia de serpientes,
se respira otro humo de otro tráfico,
de otro diésel.
Me pregunto
si tras otro color de los muros
y otra música del habla
se esconden los mismos llantos;
si el calor del aire
hará más tenue la amenaza
de vivir a la intemperie;
si al día de volver,
el sitio al que regrese
se habrá transformado
contaminado
de otras memorias.
Callejón
La espalda cae presa de alientos desconocidos,
le nacen ojos para vigilar los callejones.
Las piernas lanzan el suelo
en su mecánica de miedo
tan primordial,
tan automática.
Las manos buscan las llaves y el teléfono
palpan su vidrio y sus metales
atenuando el ritmo de la sangre
como si el calor del bolsillo
fuese una extensión de casa.
Los ojos
ven en las esquinas
cuerpos que no están,
sombras de otros tiempos.
Buscan luces
para refugiarse.
La garganta encierra su saliva
y la distancia atrapa al cuerpo
que por ese instante
no pudo dejar
de habitarse.
El autor
Carlos Espinosa Marinovich es politólogo de la Universidad de los Andes. Ha trabajado como redactor y traductor freelance por cinco años. En sus tiempos libres escribe literatura.